Rusia es un lugar fantástico y Yaroslavl es sin duda un destino que merece la pena visitar cuando viajes a Rusia. Si quieres saber qué hacer en Yaroslavl, echa un vistazo a las fantásticas opciones de actividades que tenemos disponibles.
Mejor época para viajar a Yaroslavl
Yaroslavl es una ciudad de Rusia, situada en el Distrito Federal de Moscú, a unos 250 km al noreste de la capital. La mejor época para visitar Yaroslavl es entre junio y agosto, cuando las temperaturas son más suaves y hay más luz solar. Sin embargo, la ciudad se puede visitar durante todo el año y cada temporada ofrece diferentes atractivos.
Cómo llegar a Yaroslavl
Se puede llegar fácilmente a Yaroslavl en avión, tren o autobús. La ciudad cuenta con un aeropuerto internacional, que recibe vuelos de todo el mundo, y está bien comunicado por trenes y autobuses que conectan Yaroslavl con Moscú y otras ciudades de Rusia.
Dónde hospedarse en Yaroslavl
Yaroslavl ofrece una amplia gama de alojamiento, desde hoteles de lujo hasta hostales y casas de huéspedes. La mayoría de los hoteles están ubicados en el centro de la ciudad, cerca de las principales atracciones turísticas, pero también hay hoteles en otras zonas de la ciudad.
Cómo moverse por Yaroslavl
Yaroslavl es una ciudad fácil de recorrer ya que cuenta con un buen sistema de transporte público. La ciudad cuenta con un aeropuerto internacional, que recibe vuelos de todo el mundo, y está bien comunicado por trenes y autobuses que conectan Yaroslavl con Moscú y otras ciudades de Rusia.
Qué hacer en Yaroslavl
Yaroslavl ofrece muchas atracciones turísticas como el Museo Estatal de Historia y Arte, el Teatro Dramático de Yaroslavl, la Catedral de San Nicolás y el Parque Gorky. La ciudad también es conocida por sus canales, que son un gran lugar para pasear y relajarse.
Dónde comer en Yaroslavl
Yaroslavl ofrece una amplia variedad de restaurantes, bares y cafés, que sirven platos típicos de Rusia y Europa. Algunos de los restaurantes más populares de la ciudad son el Café Pushkin, el restaurante ruso Teremok y el restaurante italiano Da Vinci.
